El autocuidado es la implicación y responsabilidad de cada individuo con el mejoramiento de su salud, que es además una influencia positiva para los que le rodean. La práctica del autoexamen bucal protege a todas las personas a partir de la adolescencia; en especial a las mayores de 50 años, que tengan o no dientes y usen o no dentadura postiza.
Permite detectar a tiempo las lesiones que aparecen en la boca antes de que sea demasiado tarde para su tratamiento. Cuando no detectamos a tiempo las lesiones de la boca estas pueden llegar a estadíos más avanzados, en los cuales comprometan más estructuras anatómicas. Esto dificulta su tratamiento y además que puede empeorar el pronóstico e impedir una evolución mas favorable.
El autoexamen bucal, paso a paso
El autoexamen bucal es un procedimiento fácil y sencillo que no necesita de tantos recursos para su realización ya que sólo con la ayuda de un espejo facial y de una buena fuente de luz se puede llevar a cabo de manera eficiente. Haciéndolo solo de 5 a 10 minutos cada 6 meses es suficiente y recuerda que es también importante visitar al estomatólogo con frecuencia.
- Lavarse bien las manos.
- Observa y palpa tus labios y la mucosa de la encía labial.
3. Observa y palpa la mucosa de los carrillos (partes laterales internas), hasta la encía.
4. Observa y palpa el paladar duro y blando (techo de la boca) y la úvula (campanilla).
5. Saca la lengua y obsérvala, muévela en todas las direcciones. Palpa la cara superior, los bordes y la punta de esta.
- Levanta la punta de la lengua. Observa y palpa su cara inferior, el suelo de la boca, los dientes y la encía inferior.
- Observa tu cuello. Compara que ambos lados estén iguales y palpa buscando cualquier aumento de volumen, dureza o nódulo.
Si durante el autoexamen bucal encuentra manchas rojas o blancas llagas o úlceras, zonas duras, dolorosas u otra variación: Consulte a su estomatólogo con urgencia. Es mejor que su mal tenga cura a tiempo porque esto mejora su calidad de vida.